Dra. Begoña Mora Peris – Historias Clínicas
«Mayor se hace el cuerpo, no el espíritu»
Identificación del paciente
Nombre: “Begoña Mora Peris”
Edad: “42”
Lugar de nacimiento: “Tarragona.”
Profesión / Especialidad: “Médico. Microbiología, parasitología.”
Puesto: «Directora Médica del hospital Mesa del Castillo.»
Dra. Begoña Mora Peris – Historias Clínicas
«Mayor se hace el cuerpo, no el espíritu»
Identificación del paciente
Nombre: “Begoña Mora Peris”
Edad: “42”
Lugar de nacimiento: “Tarragona.”
Profesión / Especialidad: “Médico. Microbiología, parasitología.”
Puesto: «Directora Médica del hospital Mesa del Castillo.»
Motivo de consulta
El Hospital Mesa del Castillo tiene cuatro niveles, 40 habitaciones, la zona quirúrgica y algunas zonas de administración, además de los dos policlínicos. No es muy grande, pero tampoco es sencillo cruzarse con alguien demasiadas veces en el día.
La doctora Mora es un caso especial. Muchos compañeros suyos pensamos que tiene el don de la ubicuidad. Otros dicen que es omnipresente. Inquieta y eléctrica, Begoña Mora va de arriba abajo papeles en mano. Parece inagotable, al menos de aspecto. Bajo la bata viste elegante, siempre bien peinada y con complementos como pulseras o anillos. Todo ello aderezado con una sonrisa perpetua que alivia los momentos más densos del día.
La Dra. Mora fue nombrada Directora Médica de este hospital hace unos meses, y vistos sus primeros pasos en el puesto, parece que nació para él.
Anamnesis
“Mi familia es de Valencia. Yo nací en Tarragona. Por motivos profesionales de mi padre he vivido en Santander y Valencia hasta que llegué a Murcia con 10 años, donde estudié mi carrera y tuve mis hijos. Hace once años que empecé a trabajar en este hospital y desde hace un mes soy directora médica.”
«Desde niña quise estudiar medicina, quería ser pediatra»
Antecedentes
¿Por qué medicina? Desde niña quise estudiar medicina, incluso afinaba la especialidad, quería hacer pediatría. Hasta que en la carrera estuve un año con una beca en una UCI pediátrica. Y decidí que eso era lo único que no podía hacer. A mí me gustan mucho los niños, pero verlos enfermos me supera. Pediatría u oncología, todo lo que tuviera que ver con los niños… no puedo. Hice la especialidad de microbiología. Mi primera intención era estar en la universidad, dar clases y hacer investigación. Pero el principio fue muy duro. Tenías que estar muchos años con becas y al final la vida y las circunstancias me hicieron seguir otro camino.
¿Tiene un maestro? Mi padre. Mi padre ha sido una persona muy trabajadora, muy constante. El día no tenía horas para él. Lo he visto estudiar una segunda carrera con cuarenta y tantos años y por las noches hacía la tesis doctoral. Fue un poco mi guía en el trabajo. En el oficio he ido tomando ejemplo de muchas personas, pero dos microbiólogas que me dirigieron la tesis doctoral son especiales. Ellas me han enseñado, a través de la investigación, a ser muy constante, a no tener prisa…
Yo soy un poco precipitada, y en la experimentación tienes que tener mucha paciencia, mucha tranquilidad. También comprobé a través de una de ellas lo que se puede llegar a tardar en entrar en la universidad y gracias a su experiencia yo tomé otro camino.
¿Cómo ha cambiado usted la forma de ejercer su oficio? La vida te da otra madurez y te va dando experiencia, pero a mí siempre me ha gustado el trato con los pacientes, con las personas en general. Mucho cambio no ha habido.
Motivo de consulta
El Hospital Mesa del Castillo tiene cuatro niveles, 40 habitaciones, la zona quirúrgica y algunas zonas de administración, además de los dos policlínicos. No es muy grande, pero tampoco es sencillo cruzarse con alguien demasiadas veces en el día.
La doctora Mora es un caso especial. Muchos compañeros suyos pensamos que tiene el don de la ubicuidad. Otros dicen que es omnipresente. Inquieta y eléctrica, Begoña Mora va de arriba abajo papeles en mano. Parece inagotable, al menos de aspecto. Bajo la bata viste elegante, siempre bien peinada y con complementos como pulseras o anillos. Todo ello aderezado con una sonrisa perpetua que alivia los momentos más densos del día.
La Dra. Mora fue nombrada Directora Médica de este hospital hace unos meses, y vistos sus primeros pasos en el puesto, parece que nació para él.
Anamnesis
“Mi familia es de Valencia. Yo nací en Tarragona. Por motivos profesionales de mi padre he vivido en Santander y Valencia hasta que llegué a Murcia con 10 años, donde estudié mi carrera y tuve mis hijos. Hace once años que empecé a trabajar en este hospital y desde hace un mes soy directora médica.”
«Desde niña quise estudiar medicina, quería ser pediatra»
Antecedentes
¿Por qué medicina? Desde niña quise estudiar medicina, incluso afinaba la especialidad, quería hacer pediatría. Hasta que en la carrera estuve un año con una beca en una UCI pediátrica. Y decidí que eso era lo único que no podía hacer. A mí me gustan mucho los niños, pero verlos enfermos me supera. Pediatría u oncología, todo lo que tuviera que ver con los niños… no puedo. Hice la especialidad de microbiología. Mi primera intención era estar en la universidad, dar clases y hacer investigación. Pero el principio fue muy duro. Tenías que estar muchos años con becas y al final la vida y las circunstancias me hicieron seguir otro camino.
¿Tiene un maestro? Mi padre. Mi padre ha sido una persona muy trabajadora, muy constante. El día no tenía horas para él. Lo he visto estudiar una segunda carrera con cuarenta y tantos años y por las noches hacía la tesis doctoral. Fue un poco mi guía en el trabajo. En el oficio he ido tomando ejemplo de muchas personas, pero dos microbiólogas que me dirigieron la tesis doctoral son especiales. Ellas me han enseñado, a través de la investigación, a ser muy constante, a no tener prisa…
Yo soy un poco precipitada, y en la experimentación tienes que tener mucha paciencia, mucha tranquilidad. También comprobé a través de una de ellas lo que se puede llegar a tardar en entrar en la universidad y gracias a su experiencia yo tomé otro camino.
¿Cómo ha cambiado usted la forma de ejercer su oficio? La vida te da otra madurez y te va dando experiencia, pero a mí siempre me ha gustado el trato con los pacientes, con las personas en general. Mucho cambio no ha habido.
¿Qué le gusta de su oficio? Me gusta cuando haces bien una cosa y el paciente se va contento. Aunque no hayas encontrado un remedio o no haya solución para su dolencia, me gusta que se encuentren atendidos, escuchados. Hay muchas veces que la familia no te está pidiendo nada más que la escuches. Aunque no le puedas ayudar, simplemente escuchar.
¿Qué no le gusta de su oficio? No poder dar una solución porque no la haya o porque es sólo momentánea. Hay pacientes mayores que terminas conociendo con el tiempo y creas un vínculo con ellos y su familia. A veces el paciente no puede ni hablar pero escuchas a la familia y conoces sus vidas, los problemas que tienen… Cuando fallecen y tienes que dar la noticia, al final hay muchas veces que aunque estés acostumbrada da igual… te llega, y a veces hasta te hace llorar con la familia.
¿Qué le gusta de su oficio? Me gusta cuando haces bien una cosa y el paciente se va contento. Aunque no hayas encontrado un remedio o no haya solución para su dolencia, me gusta que se encuentren atendidos, escuchados. Hay muchas veces que la familia no te está pidiendo nada más que la escuches. Aunque no le puedas ayudar, simplemente escuchar.
¿Qué no le gusta de su oficio? No poder dar una solución porque no la haya o porque es sólo momentánea. Hay pacientes mayores que terminas conociendo con el tiempo y creas un vínculo con ellos y su familia. A veces el paciente no puede ni hablar pero escuchas a la familia y conoces sus vidas, los problemas que tienen… Cuando fallecen y tienes que dar la noticia, al final hay muchas veces que aunque estés acostumbrada da igual… te llega, y a veces hasta te hace llorar con la familia.
Revisión por sistemas
«Soy de espíritu inquieto pero también muy paciente»
SÍNTOMAS GENERALES
¿Ha sido paciente? ¿Qué se siente? Solo una vez. En una pequeña cirugía, y reconozco que se ven las cosas de distinta manera. Cuando todavía no me habían dado el alta yo ya había hecho todo lo que no se debía de hacer. Ya me había levantado, me había vestido y me quería ir antes de tiempo. Claro que no me dejaron. Tampoco hice caso a la hora de recuperarme. Me incorporé antes de tiempo al trabajo, recaí y tuve que volver a irme de baja. Así que aprendí que hay que hacer caso a los médicos.
¿Se cuida? Sí. Cuido mi alimentación. Hago un poco de deporte, aunque sé que debo hacer más.
¿Toma muchos medicamentos? Ninguno. Algún complejo vitamínico muy de vez en cuando.
¿A qué le tiene alergia? Al sufrimiento de los niños. Algunos anuncios de la tele que por llamarnos la atención con niños necesitados me llegan hasta las entrañas. El último que vi de unos niños que sólo podían comer una vez al día… me rompía verlo.
¿Algo que haya aprendido de su padre/madre? De mi padre, el ser incansable y estar siempre disponible para todo el mundo. De mi madre la sensatez. Aunque es muy impulsiva sabe ver las cosas con un sexto sentido que me ha enseñado a tener.
¿Qué mal social atajaría con una vacuna si pudiera inventarse? La pobreza. Y sobre todo la pobreza infantil.
¿Le gusta más una fiesta o una cena tranquila? Me gusta la cena tranquila seguida de la copita con los amigos. Me gusta estar en grupo. Soy de las personas que prefiero irme a tomar un café con dos o tres personas a irme al cine donde no puedes hablar.
«Le tengo alergia al sufrimiento de los niños»
SISTEMA RESPIRATORIO
¿Un lugar donde respirar hondo? En la orilla de la playa. No soy de las que me gusta estar al sol o tomar el sol, pero dar un paseo, respirar y oír las olas del mar me relaja mucho.
¿En agosto en Benidorm? ¡No! (rie) En septiembre en cualquier playa. O en horas que esté tranquila, por la mañana o por la tarde.
¿Una experiencia que le haya cortado la respiración? Recuerdo el día que leí la tesis doctoral. Me costó mucho terminarla porque fue experimental y el día que la leí fue como un descanso. En realidad fue la tesis la que me cortó la respiración. Leerla me devolvió el oxígeno. (Risas)
SISTEMA CARDIOVASCULAR
¿Qué le dicta su corazón? Que hay que ayudar a las personas. La gente necesita que le atiendan y le escuchen. Que esté disponible para todas las personas a mi alrededor.
¿Suele obedecer? Sí.
¿Es de sangre espesa o le hierve fácilmente? Soy rápida y de espíritu inquieto pero también soy muy paciente.
Revisión por sistemas
«Soy de espíritu inquieto pero también muy paciente»
SÍNTOMAS GENERALES
¿Ha sido paciente? ¿Qué se siente? Solo una vez. En una pequeña cirugía, y reconozco que se ven las cosas de distinta manera. Cuando todavía no me habían dado el alta yo ya había hecho todo lo que no se debía de hacer. Ya me había levantado, me había vestido y me quería ir antes de tiempo. Claro que no me dejaron. Tampoco hice caso a la hora de recuperarme. Me incorporé antes de tiempo al trabajo, recaí y tuve que volver a irme de baja. Así que aprendí que hay que hacer caso a los médicos.
¿Se cuida? Sí. Cuido mi alimentación. Hago un poco de deporte, aunque sé que debo hacer más.
¿Toma muchos medicamentos? Ninguno. Algún complejo vitamínico muy de vez en cuando.
¿A qué le tiene alergia? Al sufrimiento de los niños. Algunos anuncios de la tele que por llamarnos la atención con niños necesitados me llegan hasta las entrañas. El último que vi de unos niños que sólo podían comer una vez al día… me rompía verlo.
¿Algo que haya aprendido de su padre/madre? De mi padre, el ser incansable y estar siempre disponible para todo el mundo. De mi madre la sensatez. Aunque es muy impulsiva sabe ver las cosas con un sexto sentido que me ha enseñado a tener.
¿Qué mal social atajaría con una vacuna si pudiera inventarse? La pobreza. Y sobre todo la pobreza infantil.
¿Le gusta más una fiesta o una cena tranquila? Me gusta la cena tranquila seguida de la copita con los amigos. Me gusta estar en grupo. Soy de las personas que prefiero irme a tomar un café con dos o tres personas a irme al cine donde no puedes hablar.
«Le tengo alergia al sufrimiento de los niños»
SISTEMA RESPIRATORIO
¿Un lugar donde respirar hondo? En la orilla de la playa. No soy de las que me gusta estar al sol o tomar el sol, pero dar un paseo, respirar y oír las olas del mar me relaja mucho.
¿En agosto en Benidorm? ¡No! (rie) En septiembre en cualquier playa. O en horas que esté tranquila, por la mañana o por la tarde.
¿Una experiencia que le haya cortado la respiración? Recuerdo el día que leí la tesis doctoral. Me costó mucho terminarla porque fue experimental y el día que la leí fue como un descanso. En realidad fue la tesis la que me cortó la respiración. Leerla me devolvió el oxígeno. (Risas)
SISTEMA CARDIOVASCULAR
¿Qué le dicta su corazón? Que hay que ayudar a las personas. La gente necesita que le atiendan y le escuchen. Que esté disponible para todas las personas a mi alrededor.
¿Suele obedecer? Sí.
¿Es de sangre espesa o le hierve fácilmente? Soy rápida y de espíritu inquieto pero también soy muy paciente.
SISTEMA NEUROLÓGICO
¿Qué le dicta su cerebro? Hacer las cosas bien, con orden… Al ser un poco inquieta mi cerebro me ayuda a entender que hay tiempo para todo.
¿Suele obedecer? Sí. Intento obedecerlo.
¿Se cultiva más allá de la medicina? No me gusta la tele. Prefiero entretenerme con amigos a ir al cine. Y por el poco tiempo que tengo cuando intento leer algo por la noche me quedo dormida. Con el horario que llevo y los niños no me queda para mucho más.
«Mi cerebro me ayuda a entender que hay tiempo para todo»
SISTEMA DIGESTIVO
¿Le gusta comer o saciar el hambre? Me gusta comer bien pero en pocas cantidades porque me cuido. No soy de aquellos que matan por una comida. Si hay que comer cualquier cosa o comer menos, no pasa nada.
¿Cocina? No. No me gusta cocinar. Prefiero ir a darme un paseo que estar toda la mañana cocinando.
¿Una comida favorita? Los quesos y la paella valenciana.
¿Valenciana? (Risas) Yo he dicho que me sentía murciana pero que toda mi familia es de valencia. A mí el arroz sólo me gusta comerlo en mi casa. El caldero me encanta, pero a mí el arroz tipo paella, el que me gusta es el de valencia. Son muchos años con mi abuela y mi madre cocinando el arroz así, y así es como me gusta.
¿Y de beber? Bueno. Yo soy de las que bebo alguna que otra coca cola. No quiero que la gente se haga adicta a la coca cola, pero es verdad que me gusta. También me gusta el vino, pero normalmente pido coca cola.
«Prefiero la paella valenciana»
SISTEMA ENDOCRINO
Si hablamos de hormonas, hablemos de la juventud. ¿Qué síntomas le transmiten las nuevas generaciones? Creo que hay dos grupos. Los que llevan una vida normal, salen al cine, a cenar con sus amigos, que estudia. Y hay otra generación que en Murcia desgraciadamente cada vez es más grande que son personas jóvenes sin futuro, como desamparados y dejando pasar los días. Pero hay muchos que son inquietos y les gusta mucho moverse.
¿Fue usted joven o lo sigue siendo? Yo me considero joven. Lo sigo siendo. Yo creo que voy a ser siempre una persona con espíritu joven. Además me encantan los niños. Pienso que si tienes un espíritu joven, te mantienes bien y te cuidas un poco, no tienes que hacerte mayor. Mayor se hace el cuerpo, no el espíritu.
¿Fue buena? Muy buena. No he dado ningún problema. He sido estudiosa, trabajadora, desde joven siempre he intentado ganarme la vida. Trabajaba en un banco, daba clases particulares. Siempre me he gestionado mis recursos porque me gusta comprarme ropa, viajar… todo eso me lo pagaba yo con mi trabajo. Luego me decían que tenía que estar en casa a una hora y yo volvía a esa hora. He sido muy responsable.
¿Tiene hijos? ¿Son buenos? Sí. Dos. Uno de quince y otro de doce años. También son buenos, no dan mucha guerra. La justa, como todos los niños. Es verdad que están en una época complicada porque uno está en la adolescencia y otro en la pre adolescencia, pero están bien hilvanados. De momento (sonríe).
¿Qué le gustaría que sus hijos dijeran que aprendieron de usted? El respeto a las personas. Tener un espíritu alegre y positivo frente a todo lo negativo que nos rodea. Que trabajando se consiguen las cosas. Y sobre todo a ser felices.
SISTEMA GENITOURINARIO
¿La medicina es un mundo de hombres? Pienso que la medicina era un mundo de hombres. Ahora cada vez son más mujeres las que están estudiando medicina, así que esto se está invirtiendo
«He sido estudiosa y trabajadora, siempre he intentado ganarme la vida.»
SISTEMA NEUROLÓGICO
¿Qué le dicta su cerebro? Hacer las cosas bien, con orden… Al ser un poco inquieta mi cerebro me ayuda a entender que hay tiempo para todo.
¿Suele obedecer? Sí. Intento obedecerlo.
¿Se cultiva más allá de la medicina? No me gusta la tele. Prefiero entretenerme con amigos a ir al cine. Y por el poco tiempo que tengo cuando intento leer algo por la noche me quedo dormida. Con el horario que llevo y los niños no me queda para mucho más.
«Mi cerebro me ayuda a entender que hay tiempo para todo»
SISTEMA DIGESTIVO
¿Le gusta comer o saciar el hambre? Me gusta comer bien pero en pocas cantidades porque me cuido. No soy de aquellos que matan por una comida. Si hay que comer cualquier cosa o comer menos, no pasa nada.
¿Cocina? No. No me gusta cocinar. Prefiero ir a darme un paseo que estar toda la mañana cocinando.
¿Una comida favorita? Los quesos y la paella valenciana.
¿Valenciana? (Risas) Yo he dicho que me sentía murciana pero que toda mi familia es de valencia. A mí el arroz sólo me gusta comerlo en mi casa. El caldero me encanta, pero a mí el arroz tipo paella, el que me gusta es el de valencia. Son muchos años con mi abuela y mi madre cocinando el arroz así, y así es como me gusta.
¿Y de beber? Bueno. Yo soy de las que bebo alguna que otra coca cola. No quiero que la gente se haga adicta a la coca cola, pero es verdad que me gusta. También me gusta el vino, pero normalmente pido coca cola.
«Prefiero la paella valenciana»
SISTEMA ENDOCRINO
Si hablamos de hormonas, hablemos de la juventud. ¿Qué síntomas le transmiten las nuevas generaciones? Creo que hay dos grupos. Los que llevan una vida normal, salen al cine, a cenar con sus amigos, que estudia. Y hay otra generación que en Murcia desgraciadamente cada vez es más grande que son personas jóvenes sin futuro, como desamparados y dejando pasar los días. Pero hay muchos que son inquietos y les gusta mucho moverse.
¿Fue usted joven o lo sigue siendo? Yo me considero joven. Lo sigo siendo. Yo creo que voy a ser siempre una persona con espíritu joven. Además me encantan los niños. Pienso que si tienes un espíritu joven, te mantienes bien y te cuidas un poco, no tienes que hacerte mayor. Mayor se hace el cuerpo, no el espíritu.
¿Fue buena? Muy buena. No he dado ningún problema. He sido estudiosa, trabajadora, desde joven siempre he intentado ganarme la vida. Trabajaba en un banco, daba clases particulares. Siempre me he gestionado mis recursos porque me gusta comprarme ropa, viajar… todo eso me lo pagaba yo con mi trabajo. Luego me decían que tenía que estar en casa a una hora y yo volvía a esa hora. He sido muy responsable.
¿Tiene hijos? ¿Son buenos? Sí. Dos. Uno de quince y otro de doce años. También son buenos, no dan mucha guerra. La justa, como todos los niños. Es verdad que están en una época complicada porque uno está en la adolescencia y otro en la pre adolescencia, pero están bien hilvanados. De momento (sonríe).
¿Qué le gustaría que sus hijos dijeran que aprendieron de usted? El respeto a las personas. Tener un espíritu alegre y positivo frente a todo lo negativo que nos rodea. Que trabajando se consiguen las cosas. Y sobre todo a ser felices.
SISTEMA GENITOURINARIO
¿La medicina es un mundo de hombres? Pienso que la medicina era un mundo de hombres. Ahora cada vez son más mujeres las que están estudiando medicina, así que esto se está invirtiendo